EL EVANGELIO SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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6. Jesús echó a los mercaderes del templo: con esto condena el tráfico de las cosas santas "bajo cualquier forma que sea". Dios no vende, ni su bendición, ni su perdón, ni la entrada del reino de los cielos; luego el hombre no tiene el derecho de hacerlos pagar.