3. Si me amáis, guardad mis mandamientos. - Yo rogaré al Padre, y os dará
otro Consolador, para que more siempre con vosotros. - El espíritu de la verdad a
quien no puede recibir el mundo, porque ni lo ve, ni lo conoce; mas vosotros lo
conoceréis; porque morará con vosotros, y estará en vosotros. - Y el Consolador, el
Espíritu Santo, que enviará el Padre en mí nombre, él os enseñará todas las cosas,
y os recordará todo aquello que yo os hubiese dicho. (San Juan. cap. XIV, v. 15,
16, 17 y 26).