EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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6. Aunque la horizontalidad sea la posición clásica y más generalizada en las formaciones acuosas, se ven a menudo, en los países montañosos y ocupando extensiones considerables, rocas duras cuya naturaleza indica que fueron formadas por las aguas y cuya posición es inclinada e incluso vertical. Ahora bien, según las leyes de gravedad y equilibrio de los espíritus, los depósitos acuosos sólo pueden formarse en planos horizontales, ya que cuando se formaran en planos inclinados las corrientes y el propio peso los llevaría hacia el fondo. Por tanto, resulta evidente que estos depósitos fueron elevados por alguna fuerza. Con posterioridad a su solidificación o transformación en piedra. De estas consideraciones podemos deducir con certeza que las capas pedregosas originadas en depósitos de agua cuya posición es perfectamente horizontal, fueron formadas en el transcurso de muchos siglos por aguas tranquilas, y siempre que presenten una posición inclinada se deberá a que el suelo fue sacudido y dislocado con posterioridad por la acción de movimientos generales o parciales de mayor o menor consideración.