EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

Volver al menú
48. Sin embargo, esos centros diseminados por el mundo habrían permanecido largo tiempo aislados unos de otros y confinados en sus respectivos y lejanos países. Era necesario, pues, un lazo de unión que comunicase los pensamientos de los hermanos de creencia para que cada uno supiese lo que ocurría en otros sitios. Ese lazo de unión habría faltado al Espiritismo en la antigüedad, pero lo encontramos hoy en las publicaciones que llegan a todos los sitios y que condensan en una forma única, concisa y metódica la enseñanza brindada de múltiples maneras, en diversos puntos y distintos idiomas.