EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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48. Hemos visto que para asegurar la estabilidad eterna hay una sola ley primordial y general, la cual es perceptible por nuestros sentidos mediante muchas acciones particulares a las cuales llamamos fuerzas rectoras de la Naturaleza. Veremos ahora cómo esta ley suprema asegura la armonía universal en su doble aspecto de eternidad y espacio.