EL LIBRO DE LOS MÉDIUMS

Allan Kardec

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III

Pienso que el Espiritismo es un estudio enteramente filosófico de las causas secretas, de los movimientos interiores del alma, poco o de ninguna manera definidos hasta ahora. Explica aun más de lo que descubre nuevos horizontes. La reencarnación y las pruebas sufridas antes de llegar al fin supremo, no son revelaciones sino una confirmación importante. Estoy conmovido por las verdades que este medio pone en evidencia. Digo medio con intención, porque a mi parecer, el Espiritismo es una palanca que aparta las barreras de la obscuridad. La preocupación por las cuestiones morales, está enteramente por crearse; se discute la política que examina los intereses generales, se discuten los intereses privados, se toma pasión por el ataque o defensa de personalidades; los sistemas tienen sus partidarios y sus detractores; pero las verdades morales, las que son el pan del alma, el pan de la vida, se han dejado en el polvo acumulado por los siglos. Todas las perfecciones son útiles a los ojos de la multitud, menos la del alma; su educación, su elevación son quimeras, buenas todo lo más para ocupar los ocios de los sacerdotes, de los poetas, de las mujeres, sea por seguir la moda, o como enseñanza. Sí el Espiritismo resucita al Espiritualismo, volverá a la sociedad el aliento que da a los unos la dignidad interior y a los otros la resignación; a todos la necesidad de elevarse hacia el Ser supremo, olvidado y desconocido por sus ingratas criaturas. J. J. Rousseau.