Revista Espírita - Periódico de Estudios Psicológicos - 1862

Allan Kardec

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Poesía Espírita (Sociedad Espírita de Burdeos. Médium, Sr. Ricard)

La Crianza y la Visión.

Madrecita, es tarde en la noche,
Y siento venir el sueño;
Rápido, ponme en mi cama rosa,
O en tus brazos dormiré.
Hija, a Dios haz tu oración.
Vamos, niña, de rodillas
Oremos juntos por tu padre
¡Quién está en el cielo! ...lejos de nosotros.
Está ahí arriba, ¿verdad, madre?
Cerca de Él, Dios lo quiso;
Sólo los malvados tienen su ira,
¡Pero el papi es su elegido!
¡Dios te escuche!... ¡Oh, querida hija!
¡Que tu deseo sea escuchado!
Preguntémosle por tu buen padre
¡Descanso!... ¡felicidad!... ¡bienaventuranza!
También rezo por ti, madre mía;
Digo a Dios: "Tú, Todopoderoso,
"Ya me quitaste a mi padre,
“Deja a la madre con su hija. “
¡Gracias!... ¡Gracias!... mi Gabrielle.
¡Tan joven, aún tu corazón es bueno!
Sobre ti, desde lo alto, tu padre vela:
Veo su alma en tu frente.
Quisiera, querida madre,
Ya que mi padre nos escucha,
Que vino aquí de la otra vida
Para abrazar a su querida hija.
Pídele a Dios que tal milagro
¡Tenga lugar por nosotros que tanto sufrimos!…
El alma de un muerto a veces revolotea
Alrededor de la cama de su hija.
Madrecita, es tarde en la noche,
Y siento que llega el sueño...
¡Rápido, ponme en mi cama rosa!...
¡Buenas noches, mamá!... Me voy a dormir.
¡Pero no!... ¡Ya veo!... ¡Es mi padre!
Él está aquí... junto a mi cama.
¡Acércate, madrecita!
Nos mira y nos sonríe...
Aquí, en mi frente siento su boca;
¡Su mano acaricia mi cabello!…
como tú me cierra la boca,
¡Y lo veo subir al cielo!
Madrecita, es tarde en la noche,
Y tu hija no puede dormir...
Es porque mi padre, en esta cama rosa,
¡Promete volver!

Tu ángel guardián.