El Libro de los Espíritus

Allan Kardec

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107. Caracteres generales. Predominio del espíritu sobre la materia y deseo de hacer bien. Sus cualidades y poder para practicarlo están en proporción del grado a que han llegado. poseyendo unos la ciencia, otros la prudencia y la bondad, y reuniendo los más adelantados el saber y las cualidades morales. No estando aún completamente desmaterializados, conservan más o menos, según su jerarquía, los vestigios de la existencia corporal, ora en la forma del lenguaje, ora en sus costumbres, en las que se llega a descubrir algunas desus manías, ías, y a no ser así, serían espíritus perfectos.

Comprenden a Dios y el infinito, y gozan ya de la felicidad de los buenos; son dichosos cuando hacen el bien e impiden el mal, y el amor que los une es para ellos origen de una dicha inefable no alterada por la envidia, por los remordimientos. ni por ninguna de las malas pasiones, que atormentan a los espíritus imperfectos; pero todos han de sufrir pruebas hasta que alcancen la perfección absoluta.

Como espíritus, suscitan buenos pensamientos, alejan a los hombres del camino del mal, protegen, durantela vida, a los que se hacen merecedores de protección y neutralizan la influencia de los espíritus imperfectos en aquellos individuos que no se complacen en tolerarla.

Las personas en quienes se encarnan son buenas y benevolas para con sus semejantes no ceden al orgullo, al egoísmo y a la ambición, y no sienten odio, rencor, envidia ni celos, practicando el bien, porque es el bien.

A este orden pertenecen los espíritus conocidos en las creencias vulgares con los nombres de genios buenos, genios protectores y espíritus del bien; En tiempo de superstición y de ignorancia se les ha elevado a la categoría de divinidades bienhechoras.

Se les puede dividir en cuatro grupos principales.