SUEÑO MAGNETICO: El fluido magnético, obrando sobre el sistema nervioso, produce en ciertas
personas un efecto que se ha comparado al sueño natural, pero que difiere esencialmente de él bajo varios
aspectos. La principal diferencia consiste en que, en este estado, el pensamiento queda enteramente libre, el
individuo tiene una perfecta conciencia de sí mismo y el cuerpo puede obrar como en el estado normal, lo
que revela que la causa del sueño magnético no es la misma que la del sueno natural; pero el sueño natural es
un estado transitorio que precede siempre al sueño magnético, y la transición del uno al otro es un verdadero
despertar del alma.
Por esta razón, los que son sometidos por primera vez al sueño magnético, responden casi siempre que
no, cuando se les pregunta: ¿Dormís? Y, en efecto: puesto que ven y piensan libremente, para ellos no es
dormir lo que hacen, en la acepción vulgar de la palabra.