MANUAL PRÁCTICO DE LAS MANIFESTACIONES ESPIRITISTAS

Allan Kardec

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MAGNETISMO ANIMAL (del griego y del latín magnes, imán): Se denomina así, por analogía con el magnetismo minera1. La experiencia ha demostrado que esta analogía sólo existe en apariencia, y por lo tanto, la adaptación no es exacta; pero como se ha consagrado por el uso universal, y como el calificativo que se agrega al nombre no permite equívocos, hay más inconveniente que utilidad en cambiar el nombre. Algunos lo substituyen, sin embargo, por mesmerismo; pero, hasta el presente, no prevalece. El magnetismo animal puede definirse así: Acción recíproca de dos seres vivos por medio de un agente especial denominado fluido magnético.