EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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42. Gracias a investigaciones actuales, sabemos que el Sol no está fijo en un lugar determinado y que su posición no es central, como se creía en los primeros tiempos de la Astronomía, sino que avanza en el espacio llevando con él su vasto sistema planetario, sus satélites y cometas. Ahora bien, esta marcha no es fortuita ni al azar, no vaga por los espacio infinitos llevando a sus hijos y súbditos lejos de las regiones que le han sido asignadas. Su órbita es medida y concurrente con la de otros soles de su misma categoría que se hallan rodeados, como él, por un cierto número de tierras habitadas, gravitando, todos ellos, en torno de un sol central. Su movimiento de gravitación, al igual que el de sus soles hermanos, no es apreciable mediante observaciones anuales, ya que un gran número de períodos seculares apenas bastaría para determinar el tiempo de uno de sus años siderales.