Revista Espírita - Periódico de Estudios Psicológicos - 1860

Allan Kardec

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Boletín de la sociedad parisiense de estudios espíritas

AVISO


A partir del 15 de julio próximo, la oficina de redacción de la REVISTA ESPÍRITA y el domicilio particular del Sr. ALLAN KARDEC serán transferidos a la calle Sainte-Anne Nº 59, Pasaje Sainte-Anne.

Viernes 4 de mayo de 1860 (Sesión particular)

Lectura del acta y de los trabajos de la sesión del 17 de abril.

De acuerdo con el parecer y con la propuesta de la Comisión, y después de informe verbal, la Sociedad admite como socios libres: 1º) al Sr. Achille R..., empleado en París; 2º) al Sr. Serge de W..., de Moscú.

Comunicaciones diversas – 1ª) Carta de la Sra. P..., médium, de Ruán, que dice que varios Espíritus sufridores, evocados en la Sociedad, han ido a buscarla espontáneamente para agradecerle por haber orado por ellos. Desde que ella ha recobrado su facultad medianímica, solamente ha entrado en contacto –dice ella– con Espíritus infelices. Le han dicho que su misión era principalmente la de ayudarlos a aliviar su sufrimiento.

2ª) Lectura de un dictado espontáneo sobre La vanidad, obtenido por la Sra. Lesc..., médium, miembro de la Sociedad, por parte de su Espíritu familiar. (Publicado más adelante.)

3ª) Carta del Sr. Bénardacky, fechada en Bruselas, que contiene una comunicación que él ha obtenido sobre la teoría de la formación de la Tierra por incrustación de varios cuerpos planetarios, y el estado cataléptico en el cual son encontrados sus primeros habitantes y los otros seres vivos. Esta comunicación tuvo lugar a propósito de un fenómeno de catalepsia voluntario que se habría producido –dicen– con algunos habitantes de la India y del interior de África. Ese fenómeno consiste en que ciertos individuos se harían enterrar vivos, a cambio del pago de una suma de dinero, y al cabo de varios meses volverían a la vida, después de ser retirados del ataúd.

El Sr. Arnauld d’A..., miembro de la Sociedad, antiguo amigo y consejero del fallecido rey de Abisinia, y que residió mucho tiempo en ese país, cita dos casos de su conocimiento, de los cuales uno ocurrió en Inglaterra y el otro en la India, y que parecen confirmar la posibilidad de la catalepsia voluntaria de corta duración; pero él declara que nunca ha conocido hechos de la naturaleza citada por el Sr. Bénardacky. El Sr. d’A..., que está familiarizado con la lengua y las costumbres de ese país, el cual observó como hombre de Ciencia, estaría asombrado de que hechos tan extraordinarios no hubiesen llegado a su conocimiento, de donde se puede suponer que haya habido una exageración.

Estudios – 1º) Se pregunta si se puede hacer una nueva evocación del Sr. Jules-Louis C..., muerto en el hospital del Val-de-Grâce en condiciones excepcionales, y ya evocado el 24 de febrero (ver el número de abril, página 97). Este pedido es motivado por la presencia de una persona de su familia que tiene un gran interés en dicha evocación y, además, por el deseo de evaluar el progreso que él puede haber hecho después. –Responde san Luis que el Espíritu prefiere ser llamado en una sesión íntima.

2º) Cuestiones sobre la teoría de la formación de la Tierra por incrustación y sobre el estado cataléptico de los seres vivos en su origen, a propósito de la comunicación del Sr. Bénardacky. Al respecto, numerosas observaciones son realizadas por varios miembros.

3º) Estudio sobre el fenómeno, relatado en la última sesión, de un perrito que reconoce a su dueño evocado. El Espíritu Charlet interviene espontáneamente en la cuestión y desarrolla una teoría en la cual resalta la posibilidad del hecho. (Publicado más adelante.)

Viernes 11 de mayo de 1860 (sesión general)

Lectura del acta y de los trabajos de la sesión del 4 de mayo.

Comunicaciones diversas – 1ª) Carta del Sr. Rabache, escrita de Liverpool, en la que relata una comunicación espontánea que le ha sido dada por Adam Smith, sin que la haya provocado; después narra la conversación que se siguió a dicha comunicación, en la cual las respuestas eran dadas en inglés, mientras que las preguntas eran hechas en francés. En esta conversación, Adam Smith critica el punto que sirvió de base a su sistema económico; él dice que, si escribiera hoy su libro sobre los Sentimientos Morales, daría a éstos por principio: la conciencia innata, teniendo como móvil especial el amor.

2ª) Segunda carta del Sr. Bénardacky, que completa las comunicaciones que él ha obtenido sobre la catalepsia.

Nota – En una sesión particular, san Luis, interrogado sobre el valor de estas comunicaciones, confirma varias partes de las mismas, pero agrega lo siguiente, por intermedio del Sr. T..., médium:

«Podéis estudiar esas cosas, pero os aconsejo a no publicarlas todavía; son necesarios muchos otros documentos, que os serán dados más tarde, y que las circunstancias traerán. Al publicarlos ahora, vosotros correríais el riesgo de cometer graves errores, que seríais obligados a corregir, lo que sería lamentable y haría mucho daño al Espiritismo. Por lo tanto, sed muy prudentes en lo que atañe a las teorías científicas, porque es sobre todo ahí que debéis temer a los Espíritus impostores y a los pseudosabios. Recordaos lo que tan a menudo se os ha dicho: los Espíritus no tienen la misión de traeros la Ciencia totalmente resuelta, que debe ser el fruto del trabajo y del genio del hombre, ni de levantar todos los velos antes que el tiempo haya llegado. Sobre todo, tratad de mejoraros: he aquí lo esencial; Dios tendrá más en cuenta vuestro buen corazón y vuestra humildad, que un saber donde la curiosidad ocupa frecuentemente la mayor parte. Es practicando Sus leyes –practicándolas, comprended bien– que mereceréis ser asistidos con las comunicaciones de los Espíritus verdaderamente superiores, que nunca engañan.»

No es posible ignorar la profundidad y la elevada sabiduría de estos consejos. Este lenguaje, simple y sublime al mismo tiempo, marcado por una extrema benevolencia, contrasta singularmente con el tono altivo y mordaz o con la jactancia de los Espíritus que se imponen.

3ª) Lectura de una noticia enviada por el Sr. de T..., conteniendo la descripción de un mundo muy superior, al cual su Espíritu ha sido transportado durante el sueño. Ese mundo parece tener mucha analogía con el estado señalado para el planeta Júpiter, pero en un grado aún más elevado.

Estudios – 1º) Dos dictados espontáneos son obtenidos: uno por la Sra. Parisse, firmado por Louis; el otro por el Sr. Didier Hijo, firmado por Gérard de Nerval.

2º) Cuestiones relacionadas con la visión del Sr. T..., dirigidas a san Luis. Lo vago y la incoherencia de las respuestas revelan la evidente intromisión de un Espíritu embustero.

3º) Evocación de Adam Smith, a propósito de la carta del Sr. Rabache. Preguntas sobre sus actuales opiniones, comparadas con las que ha emitido en sus obras. Él confirma lo que ha dicho al Sr. Rabache, en lo tocante al error del principio que sirvió de base en sus evaluaciones morales.

Viernes 18 de mayo de 1860 (Sesión particular)

Lectura del acta y de los trabajos de la última sesión.

De acuerdo con el parecer y con la propuesta de la Comisión, y después de informe verbal, la Sociedad admite como socios libres: 1º) al Sr. B..., comerciante de París; 2º) al Sr. C..., también comerciante de París.

Comunicaciones diversas – 1ª) Lectura de la siguiente comunicación, obtenida en una sesión particular por la Sra. S..., médium, acerca de los trabajos de la última sesión.

Preg. ¿Por qué san Luis no se comunicó el viernes pasado, a través del Sr. Didier, y dejó hablar a un Espíritu embustero? –Resp. San Luis estaba presente, pero no quiso hablar. Además, reconocisteis que no era él. Es lo esencial. No habéis sido engañados, desde el momento en que habéis reconocido la impostura.

Preg. ¿Cuál era su objetivo al no querer hablar? –Resp. Podéis preguntarle a él mismo; está aquí.

Preg. San Luis, ¿podríais darnos a conocer el motivo de vuestra abstención? –Resp. Quedasteis contrariado con lo que pasó; entretanto, debéis saber que nada sucede sin motivo. A menudo hay cosas cuyo objetivo no comprendéis y que a primera vista os parecen malas –porque vosotros sois muy impacientes–, pero cuya sabiduría reconoceréis más tarde. Por lo tanto, tranquilizaos y no os inquietéis por nada; nosotros sabemos distinguir a los que son sinceros, y velamos por ellos.

Preg. Si ha sido una lección que nos has querido dar, lo comprenderíamos, cuando estamos entre nosotros; pero en presencia de extraños, que podrían recibir una mala impresión, parece que el mal prevalece sobre el bien. –Resp. Vosotros os equivocáis al ver las cosas así; el mal no es lo que creéis, y os aseguro que hubo personas ante las cuales esa especie de revés ha sido una prueba de buena fe de vuestra parte. Además, del mal suele salir el bien. Cuando veis que un jardinero corta las ramas grandes de un árbol, deploráis la pérdida del follaje, y esto os parece un mal; pero una vez cortadas estas ramas parasitarias, los frutos son más bellos y más sabrosos: he aquí el bien, y entonces evaluáis que el jardinero fue sabio y más precavido de lo que creíais. De la misma manera, si se amputa un miembro a alguien enfermo, la pérdida del miembro es un mal; pero si queda mejor después de la amputación, es un bien, porque quizá le hayan salvado la vida.

Reflexionad bien en esto y habréis de comprenderlo.

Preg. Esto es muy justo; pero ¿cómo se explica que, haciendo un llamado a los Espíritus buenos y pidiéndoles que alejen a los impostores, este llamado no sea atendido? –Resp. Es atendido, no lo dudéis. Pero ¿estáis bien seguros que ese llamado ha sido hecho desde el fondo del corazón por todos los asistentes, o que no haya alguien que por un pensamiento poco caritativo y malevolente, o por deseo, atraiga para vuestro medio a un Espíritu malo? He aquí por qué os decimos sin cesar: Sed unidos; sed buenos y benevolentes unos con los otros. Jesús ha dicho: Cuando estuviereis reunidos en mi nombre, yo estaré en medio de vosotros. ¿Creéis, por eso, que sea suficiente pronunciar su nombre? No penséis así y estad realmente convencidos de que Jesús no va sino adonde es llamado por corazones puros, junto a los que practican sus preceptos, porque son éstos los que verdaderamente están reunidos en su nombre; Él no va a los orgullosos, ni a los ambiciosos, ni a los hipócritas, ni a los que desean el mal de su prójimo. Fue a ellos que Jesús se refería: No entrarán en el reino de los cielos.

Preg. Comprendemos que los Espíritus buenos se aparten de aquellos que no escuchan sus consejos; pero si entre los asistentes existen los malintencionados, ¿es ésta una razón para punir a los otros? –Resp. Me admiro con vuestra insistencia; parece que me he explicado bastante claramente para quien desee comprender. Es preciso repetiros, pues, para que no os preocupéis con esas cosas, que son pueriles ante el gran edificio de la Doctrina que se eleva. ¿Creéis que vuestra casa va a caerse porque una teja se movió de lugar? ¿Vosotros dudáis de nuestro poder y de nuestra benevolencia? No. ¡Pues bien! Dejadnos entonces obrar, y estad ciertos de que todo pensamiento, bueno o malo, tiene su eco en el seno del Eterno.

Preg. No habéis dicho nada sobre la invocación general que nosotros hacemos al comienzo de cada sesión; ¿queréis decirnos lo que pensáis al respecto? –Resp. Siempre debéis llamar a los Espíritus buenos; la forma –ya lo sabéis– es insignificante: el pensamiento lo es todo. Os sorprendisteis con lo que pasó; pero ¿habéis realmente examinado los rostros de aquellos que os oían cuando hacíais esta invocación? ¿No visteis, más de una vez, la sonrisa de sarcasmo en ciertos labios? ¿Qué Espíritus creéis que traen esas personas? Espíritus que –como ellas mismas– se ríen de las cosas más sagradas. Es por eso que también os he dicho para no admitir, de forma alguna, al primero que llegue, y para evitar la presencia de los curiosos y de aquellos que no vienen para instruirse. Cada cosa vendrá a su tiempo y nadie puede prejuzgar los designios de Dios; os digo, en verdad, que aquellos que hoy se ríen de estas cosas, no se reirán por mucho tiempo.

SAN LUIS

2ª) Nota dirigida por el Sr. Jobard, de Bruselas, sobre la evocación que él ha hecho del Sr. Ch. de Br..., recientemente desencarnado.

3ª) Lectura de una comunicación obtenida por la Sra. Lesc..., médium, miembro de la Sociedad, conteniendo interesantes explicaciones sobre la historia del Espíritu y el perrito. (Publicada más adelante.)

4ª) Otro dictado espontáneo recibido por la misma médium: La tristeza y el disgusto.

5ª) Carta del Sr. B..., profesor de Ciencias, acerca de la teoría que le ha sido dada sobre las horas fijas, en las cuales cada Espíritu puede manifestarse. Sin excepción, esta teoría es considerada por todos como el resultado de una obsesión por parte de Espíritus sistemáticos e ignorantes. La experiencia y el razonamiento demuestran sobremanera que la misma no merece un examen serio.

6ª) Relato de un hecho curioso, referente a un retrato pintado bajo la influencia de una mediumnidad natural intuitiva. El Sr. T..., artista pintor, cuyo padre había desencarnado en una edad en que no podía conservar ningún recuerdo de sus facciones, lamentaba mucho –así como los otros miembros de su familia– por no tener ningún retrato de él. Un día, cuando estaba en su taller de pintura, tuvo una especie de visión o, mejor dicho, una imagen se diseñó en su cerebro, y él se puso a reproducirla en la tela. Su ejecución se llevó a cabo en varias sesiones, durante las cuales la misma imagen se presentaba ante él. Le vino el pensamiento de que pudiera ser su padre, pero no habló esto con nadie; cuando el retrato fue acabado, se lo mostró a sus parientes y todos ellos reconocieron a su padre sin titubear.

Estudios – 1º) Cuatro dictados espontáneos son obtenidos simultáneamente: el primero por la Srta. Huet, por parte del Espíritu que comenzó a escribir sus Memorias; el segundo por la Sra. L..., intitulado: La fantasía, de Alfred de Musset; el tercero por la Srta. Stéphanie S..., de un Espíritu familiar, desencarnado hace algunos años y que, cuando encarnado, se llamaba Gustave Lenormand. Es un Espírito aún poco adelantado, de un carácter jovial y espirituoso, pero muy bueno, muy solícito y que, en varias familias donde muy frecuentemente va, es considerado como amigo de la casa. Un día había dicho que vendría a expulsar a los Espíritus malos. El cuarto dictado ha sido recibido por la Srta. Parisse, firmado por Louis.

2º) Evocación de un encarnado: el Sr. B..., profesor de Ciencias, del cual hemos hablado anteriormente, y que había sido designado por otro Espíritu como pudiendo dar informaciones sobre François Bayle, médico del siglo XVII, cuya biografía quieren hacer. El resultado de esta evocación tiende a probar que Bayle, muerto, y el Sr. B..., vivo, son el mismo ser. En efecto, este último suministró las informaciones deseadas y dio varias explicaciones del más alto interés. (Será publicada.)

Viernes 25 de mayo de 1860 (Sesión general)

Lectura del acta y de los trabajos de la última sesión.

Comunicaciones diversas – 1ª) Carta del Dr. Morhéry, que contiene una evaluación, desde el punto de vista científico, de la medicación empleada –bajo su dirección– por la Srta. Désirée Godu. (Publicada más adelante.)

2ª) Lectura de un dictado espontáneo obtenido por la Sra. Lesc..., médium, sobre La miseria humana.

3ª) Lectura de una serie de comunicaciones muy notables, recibidas en sesiones particulares por diversos miembros de la familia rusa W... (Serán publicadas.)

4ª) Lectura de la evocación –hecha en sesión particular– de la Sra. de Duret, médium, desencarnada en Sétif (Argelia) el 1º de mayo. Contiene importantes análisis sobre los médiums.

Estudios – 1º) Evocación de la Sra. de Duret: continuación de sus comunicaciones.

2º) Evocación de Charles de Saint-G..., deficiente mental, de trece años. Contiene curiosas revelaciones sobre el estado de ese Espíritu, antes y durante su encarnación. (Publicada más adelante.)

3º) Estudio sobre el Sr. V..., oficial de la Marina, encarnado, que ha conservado un recuerdo preciso de su existencia y de su muerte en la época de la matanza de la Noche de san Bartolomé. (Será publicado.)