EL CIELO Y EL INFIERNO o La Justicia Divina según el Espiritismo

Allan Kardec

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6. A esto se opone que todas las leyes de Moisés son dictadas en nombre de Dios, como las de Sinaí. Si se las juzga todas de origen divino, ¿por qué los mandamientos están limitados al Decálogo? Es porque se ha hecho diferencia. Si todas dimanan de Dios, todas son igualmente obligatorias. ¿Por qué no se observan todas? ¿Por qué, entre otras, no se ha conservado la circuncisión que Jesús sufrió y que no abolió? Se olvida que todos los legisladores antiguos, para dar más autoridad a sus leyes, dijeron que las recibieron de una divinidad. Moisés, más que ningún otro, tenía necesidad de este apoyo, en razón del carácter de su pueblo. Si a pesar de esto tuvo tanto trabajo en hacerse obedecer, éste hubiera sido mayor si las hubiese promulgado en nombre propio.


¿No vino Jesús a modificar la ley mosaica, y no es su ley el código de los cristianos? ¿No ha dicho: "Habréis aprendido que ha sido dicho a los antiguos tal y cual cosa, y yo os digo otra"? ¿Pero ha tocado la ley del Sinaí? De ningún modo. La sanciona, y toda su doctrina moral no es más que desenvolvimiento de aquélla. Pero en ninguna parte habla de la prohibición de evocar a los muertos. Ésta era una cuestión bastante grave, sin embargo, para que la hubiese omitido en sus instrucciones, cuando ha tratado otras más secundarias.