El Libro de los Espíritus

Allan Kardec

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-¿No ha de establecerse aquí una distinción entre el bien que pueda hacerse al prójimo y el cuidado que uno pone en corregirse de sus defectos? Concebimos que hacer el bien con la idea de que se nos tomará en cuenta en la otra vida, es poco meritorio; pero enmendarse, vencer sus pasiones, corregir su carácter con la mira de aproximarse a los espíritus buenos y elevarse ¿es igualmente señal de inferioridad?

«No, no. Por hacer el bien entendemos el ser caritativo. El que calcula lo que cada buena acción puede reportarle así en la vida futura como en la terrestre, procede como un egoísta; pero no existe egoísmo en mejorarse con la mira de acercarse a Dios, pues este es el objeto a que debe propender cada uno».